Felices para siempre

En todas las grandes historias, desde los cuentos de hadas hasta los mitos, siempre hay una trama en la que alguien va más allá de sus limitaciones aparentes.

No tenemos que ser el Príncipe Encantado o Pocahontas para elevarnos por encima de nuestro estado actual. Todo lo que necesitamos es liberarnos de nuestra zona de comodidad.

Ése es el camino hacia un “felices para siempre”.

Todo el mundo quiere la paz mundial, pero no todos están dispuestos a hacer lo que sea necesario para que ocurra.

Terminar con los conflictos globales comienza con terminar con los individuales. Ofrecer tolerancia ayuda en el proceso para crear un mundo mejor para todos.

Abrir las puertas para la paz depende de nosotros. La tolerancia y la dignidad humana son las llaves.

Yehudá Berg